4/12/14

7 - 5 - 10 - 6

Mi penúltima historia con Unísono me llevó ayer de un lado a otro de Madrid, de línea en línea de metro, en una mañana de lo más viajera...Tras los dos meses trabajando allí, me correspondía una compensación por los días de vacaciones no disfrutados, los pluses de idiomas, la semana de formación y alguna cosilla así más; y para cobrar dicha compensación tuve que volver hasta la sede central de la empresa, a un buen paseo del metro de Suanzes... qué les costaría hacernos un ingreso en cuenta, digo yo (y me contesto: un par de euros de comisión o algo así, supongo). Total, que llegados allí, resulta que dicha liquidación nos la pagan... con un cheque, qué cosas, yo nunca había visto uno de papel y hueso. Un cheque que cobrar en el Banco Sabadell... pero ¡ay, amigo!, en una única sucursal de Cuzco, so pena de, si no, pagar tres euros de comisión... 3-1,24 que me costaba el viaje extra en metro = 1,76 €: suficiente para dos cafés, así que me compensaba ir. Y luego a Nuevos Ministerios, y ya por fin a la Facultad ya casi para comer... y por el metro músicos, muchos músicos. Y el contraste de la voz masculina de la estación de cercanías con la voz femenina del metro... yo y los trenes; no dejo de fijarme en las cosas más peregrinas.

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